Caminaba despacio por la Belgrano, como se imaginarán estaba en camino hacia la Mesa 7, como todas las tardes, el lunes no había sido un día demasiado movido, así que el tiempo me sobraba, tenía que comprar alimento para el Sultán, la bolsa de 10 kilos apenas le dura 15 días, de tal manera que me dirigí presuroso hasta el mercado.
El único problema es que estoy sin auto, un asunto de amortiguadores me dejaron a pata. El mercado de la Alvear es un buen lugar para comprar alimento para perros, es mas barato y lo venden a granel.
Mientras el caballero despachante me embolsaba 4 kilos de Royal Canin sabor carne, al lado mío se para un caballero que buscaba 3 kilos de alimento para gatos, me parece que es medio mucho para un solo felino, así que imaginé que eran varios los gatos que alimentar.
Al principio no le día mayor importancia al caballero en cuestión, hasta que cuando pagaba me doy con que era El Jetón, el amigo del Gordo Ñoqui.
Salimos casi juntos, yo caminaba tres metros atrás, ambos íbamos en el mismo sentido, caminamos por Balcarce hacia Belgrano, me llamó la atención su andar cansino y despreocupado, es más, el Jetón tarareaba una melodía que me sonaba conocida, aunque no podía llegar a saber cuál era, el ruido de la calle me lo impedía.
Hasta que no pude más con mi curiosidad, y antes de llegar a Carena me le puse casi a la par, y me di cuenta que cantaba Pibe Cantina, justo la estrofa que dice...
Pibe cantina de que te
la das, si sos su lacha
borracho y haragán.
Las chicas del barrio te gritan al pasar,
dale guachín sacanos a pasear...
Parece que Yerba Brava es uno de sus grupos favoritos, y yo que pensaba que Pibes Chorros era la banda de cabecera del fellnerismo.
Aunque también se puede interpretar como una canción autobiográfica del bueno del ex amanuense de Eduardo Fellner.
El Jetón paso por la Mesa 7, tiró un hola general y le hizo seña al Gordo Ñoqui que mas tarde se hablarían por teléfono.
Estaban todos, ya en un interesante cambio de datos, Nicotina hablaba del retiro espiritual que convocó Gerardo en el José Hernández.
- Miren changos, Gerardo parecía el Pastor Giménez y lejos de ser una reunión de trabajo era un grupo de auto ayuda, se aplaudían a si mismos y se felicitaban solos, por momento era un espectáculo surrealista... - contaba Nicotina.
- Y vos qué hacías ahí? - indagó El Rengo.
- Tenía que buscarlo al Tucán, así que fui, en la puerta puse cara de funcionario y me dejaron pasar sin problema...
- Pero se supone que era una reunión para mostrar todo lo que hacen...? - siguió indagando El Rengo...
- Eso quería Gerardo, pero me contó Walter que lejos estuvo de ser lo que se esperaba, que los muchachos y las muchachas no entienden que hay que laburar, parece que Gerardo se fue caliente...
- El Gordo me contó que en un momento el propio Gerardo le pidió al del sonido que baje un poco el volumen y al orador de turno que intente no levantar la voz… aportó El Fisgón.
Nadie entendía bien a lo que se refería el alátere del Gordo, todos nos miramos algo desorientados, lo que indudablemente percibió y siguió con su relato – no es en sentido figurado, lo que pasó fue que real… el Gordo Oheller se durmió y comenzó a roncar, la pobre Isolda estaba sentada al lado y se cansó de pegarle codazos para que se despierte, por supuesto que hasta Gerardo se dio cuenta y se apiadó del turista e hizo bajar el volumen para que pueda dormir tranquilo…
La mesa estalló en carcajada, nadie le creía, pero El Fisgón, soldado de mil batallas sacó su celular y aportó una foto que tenía como remitente al Colo Rizzotti.
Inclusive El Fisgón fue más allá y comentó que luego de la reunión, Alejandra estaba preocupada porque Oheller, cuando apoyó su cabeza en el hombro de Isolda, dejó caer un prominente hilo de baba que mojó el hombro derecho del elegante saco negro de la titular de la cartera educativa.
Todos escuchaban y reían a carcajadas, mientras enviaban la foto de Oheller durmiendo a centenares de contactos y grupos de whatsapp. Seguro cada uno tenía algún dato extra del encuentro en el José Hernández, pero Nicotina, quería darle paso a los otros sabiondos para enterarse de las cuestiones políticas, entendí claramente el mensaje así que miré al Gordo Ñoqui que seguía fumando puchos ajenos y le pregunté como había sido el desenlace de la lista del PJ.
- El viernes habían dos lugares donde el asunto se cocinaba, una parte de la banda en el Howard Johnson y otra en el 4 piso del diario El Tribuno. Celso entre el hotel del La Gringa y la Av. Fascio y el Bocha en su diario... la listas no eran tan importantes, lo fundamental era matar al fellnerismo...
- Pero quedó Liliana... - dijo El Rengo.
- Quedó, pero sin posibilidad de construir absolutamente nada, ahora la llave del negocio la tiene La Gringa. - sentenció Nicotina.
Me sentía algo decepcionado, nada nuevo hasta ahora, esto ya lo sabíamos desde la semana pasada y se lo dije a Nicotina, pero inmediatamente levantó el guante y tiró sobre la mesa - lo más importante es quienes volvieron a ser visibles...
Por supuesto que todos queríamos saber quienes habían vuelto al ruedo, y prácticamente a coro le gritamos a Nicotina que largue el rollo.
Con cierta parsimonia, le preguntó a El Fisgón si lo aguantaba con otro 3/4 y ante la respuesta quejosa y positiva, Nicotina continuó con su relato.
- Todos sabemos que los quieren limpiar a los Fellner, que el PJ va a quedar con La Gringa como único patrón, pero para esto había que activar todas las células permeables a los mandatos de La Gringa, y ahora los que se activaron de manera orgánica y servil a La Gringa son los Colombianos, el Bocha operaba desde su diario, Pedro había las veces de mensajero entre el PJ y el Frente Renovador, y Marcelo nunca cortó en teléfono con su histórico patrón...
- Es verdad... todo es verdad... - expresó un resignado Fisgón, que en el jornada del viernes estuvo en todo momento con El Gordo y con Ignacio.
- El Mataco estaba loco... Pedro operaba directamente con El Gordo, para colmo después aparecía Marcelo y lo operaba también... los colombianos volvieron con todo y me parece que lo empernaron al Gordo... - aportó El Fisgón.
El Rengo no había hablado en toda la noche, y en su clásica voz tenue y con la mirada algo distante lanzó - para que La Gringa quería quedarse con todo y sabía que El Bocha estaba cotizando en baja, así que se aprovechó d esa situación y lo obligó a que active una ves más a Los Colombianos, Pedro es un traidor nato, lo único que le importa es su futuro, Marcelo esta cagado en las patas porque El Bocha le conoce todo el ADN, así que no fue difícil juntarlos de nuevo, y que comiencen a funcionar como lo hicieron siempre...
- Entonces ahora el jefe de la banda es La Gringa y los Colombianos la mano de obra pesada...??? - pregunté aterrado.
- Así es... - dijo El Rengo.
Me quedé perplejo, era mucho para mi, dejé 100 p para los dos cafés que había tomado y me levanté de la mesa, ya no tenía ganas de enterarme de nada más, me fui silbando bajito mientras pensaba en que La Gringa ahora es la Matrona y El Bocha, Pedro y Marcelo sus incondicionales eunucos.